miércoles, 11 de diciembre de 2013

Método. I

El método hipotético-deductivo me obliga a combinar la reflexión racional (la formación de hipótesis y la deducción) con la observación empírica. En cristiano: Que mi teoría se basa en los hechos que conozco mezclados con los que la razón me otorga.

No he dejado de pensar en los muros una y otra vez y su afán por protegerlos. Veamos. Siguiendo la lógica y el método hipotético-deductivo, podemos averiguar lo siguiente: 
Personas importantes y con poder quieren protegerlos >> los muros son importantes >> ¿Por qué son importantes? >> Porque protegen personas >> ¿Único motivo? >> Posiblemente no. Posiblemente haya algo más detrás. Un objetivo secundario, sino la historia no tendría trama. Sigamos la hipótesis de que sí. Existe un segundo motivo. >> Cuando proteges algo, ¿por qué lo haces? >> Por que te importa >> ¿Qué es importante? >> Un secreto, por ejemplo, es algo importante. Y más en esta serie en la que todo son secretos. >> CONCLUSIÓN>>>  Los muros guardan algún secreto importante. Secreto segura/prácticamente conocido por los curas, por eso no quieren que sean tocados y, ni si quiera reparados. >> ¿Qué motivo? ¿Qué secreto? A simple vista, parecen muros normales. >> El secreto pues, ya que por fuera o a simple vista parecen normales, podría estar en el interior. >> Lo que nos lleva a preguntarnos de qué están echos >> ¿Materiales? Hablan de Dioses... Es extraño. En este punto empiezo a perderme.>> Lo que me lleva a la conclusión de que, cuanto más perdido estoy, más cerca está la respuesta pues, si no tuviera dudas: No sería un secreto. Como conclusión a esta parrafada saco en limpio que: 1. Los curas son malos. 2. Los muros guardan un secreto. 3. Un secreto que a simple vista no se ve. 4. Un secreto que, entonces, si mis deducciones son correctas, deberían estar en el interior de los muros. 

Aunque este teoría tiene un gran sesgo: 
Cuando el titan acorazado rompió el Muro María... Ese supuesto secreto quedaría a la luz del día, ¿no? No sé. Creo que en este punto se me cae la torre de naipes que conformaban mi teoría.

PD: Como autocrítica a mis deducciones y añadido al sesgo, decir que... Me parece algo bastante descabellado lo que he planteado y que no le encuentro mucho sentido. (?)

Existen tres partes con mis reflexiones, una es esta. Otra algo más descabellada y la tercera que simplemente es un hipotético final. Supongo que cuando me aburra, iré poniendo cosas.



lunes, 9 de diciembre de 2013

Sonrisa muerta


Estoy cansado de todo. Incluso de existir. He buscado muchas veces mi sonrisa entre las nubes pero soy incapaz de encontrarla en medio de esta tormenta depresiva. Estoy cansado de intentar llevar el timón de un barco llamado vida yo sólo y ver cómo poco a poco y sin saber bien por qué, mis marineros se tiran por la borda o, lo que es peor, se dedican a agujerear más y más el casco.
Estoy hundido, cansado. Quiero poner fin a mi vida de una vez por todas. Creía que podría encontrarle un atisbo de lógica, un mínimo de esperanza y ver tierra. Sin embargo, no he encontrado nada más que afilados arrecifes y bravas mareas.
He perdido mi porte. Camino doblado, agachado, tuerto de alma y espalda, con la mirada perdida y la boca seca. Con la sonrisa muerta en una esquina, agonizante. Hasta no hace mucho creí que podría sacarla del pozo en el que se había caído. Ahora me doy cuenta que la cuerda con la que lo intentaba era demasiado corta, débil.
Sin embargo, debo seguir mi camino. No podré fin a mi vida. Cometeré un acto más horrible si cabe: vivirla sin pasión, alegría o gozo. Simplemente viviré observando cómo en mi cara se dibujan arrugas y en mi corazón estrías de un infarto. Levantaré muros a mi alrededor, teñiré de negro mi interior y jamás volveré a sonreír con el alma en los labios. Se acabó. Esta libélula ha perdido su camino y ya no avanza ni retrocede. Simplemente ha hecho un parón eterno en su camino.