martes, 3 de enero de 2012

Por los pelos

Sonó el despertador, pero no me hizo falta, porque yo ya estaba despierto desde hace rato. Me di media vuelta y me hice el remolón. El corazón me latía rápido.
Entonces entró mi madre y me dijo que me levantara, que iba a llegar en unos minutos.
Me vestí con los ojos cerrados y me lavé los dientes después de desayunar un par de sorbos de leche.

Llegó puntual, como casi siempre. Nos montamos en el coche y mi madre nos llevó a la universidad. Ambos estábamos nerviosos.

Yo mi enorme sentido de la orientación hizo que mi madre nos dejase a 54365464 facultades más lejos de la de Biología.

Comenzamos a dar vueltas en círculos como subnormales. Dios, el tiempo se nos acababa y no sabíamos donde estábamos.
Que horribles fueron esos 45 minutos... y ya, cuando estábamos desesperaditos perdidos, encontramos el camino correcto.
Entramos en la facultad sudando y cansados... no se si a mi acompañante le hizo bien, pero a mi me vino de puta madre para distraerme e ir relajado al examen de selectividad que comenzaba en 3 minutos.

2 comentarios:

  1. Facultad de Minas XDDDD Lo mejor fue recorrer tres para que estuviese bajando una cuestita <_<

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  2. ya. Menudos subnormales estamos hechos. Y al llegar, nos encontramos con Cintia, no?

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